YA LO VES
Ya lo ves,
Sigo viviendo todavía en el sol de la tarde,
En la brisa cuando vuela el Halcón.
En la lluvia del pasado,
En el cuerpo triste,
Envuelto en el sudario.
En las venas destrozadas en un grito de espinas,
En el dolor continuo de tu voz.
En los pianos de manantiales,
En los chopos y los castaños,
En el corazón y la garganta.
En el campo blanco,
En la luz que se extingue,
En la sangre dolorida.
Y me quedé viviendo en moldes de cobre,
Oliendo tu nombre,
Para criar espíritus eternos,
Para que trepen al anochecer.
Sin arrogancias,
Sin triunfos personales.
Ya lo ves,
Sigo viviendo.
Pero me faltó tiempo,
Para borrar las fechas que hoy acontecen,
En los almanaques amarillentos.